Divine Mercy Sunday

SABBATH GUIDE

   Second Sunday in Easter

First Reading -Acts 2:42-47| Responsorial Psalm - Ps 118 | Second Reading - 1 Pt 1:3-9 | Gospel - Jn 20:19-31

https://bible.usccb.org/bible/readings/041623.cfm

“Blessed be the God and Father of our Lord Jesus Christ, who in his great mercy gave us a new birth to a living hope through the resurrection of Jesus Christ from the dead.” 1 Pet 1:3


For the past 23 years - since the turn of the century - the Sunday after Easter, is celebrated as “Divine Mercy Sunday" by the Church. It is appropriate to continue the celebration of Easter and rejoice in the great love and mercy the Lord has revealed to us through His death and Resurrection. Jesus spoke to a Polish nun named St. Faustina of the depths of His mercy He has for His people:

“I am Love and Mercy itself (Diary, 1074). My Heart overflows with great mercy for souls, and especially for poor sinners ... it is for them that the Blood and Water flowed from my Heart as from a fount overflowing with mercy (Diary, 367). Let no soul fear to draw near to Me, even though its sins be as scarlet (Diary, 699). My mercy is greater than your sins; and those of the entire world (Diary, 1485). I let my Sacred Heart be pierced with a lance, thus opening wide, the source of mercy for you. Come then, with trust to draw graces from this fountain (Diary, 1485).”

To receive the mercy of Jesus and show it to others, we follow the ABCs of mercy*:

  • Ask for mercy - God deeply desires never to give in to despair because of our sin, but instead, to recognize our faults and come to Him immediately asking for His mercy.

  • Be merciful - As we receive mercy; so we also show mercy through love and forgiveness.

  • Completely trust in the mercy of God - The words “Jesus, I trust in You” are often found in the Divine Mercy image. Our Lord is pained when we do not trust in Him and His mercy - He wants us to entrust ourselves to Him unconditionally.

In the Gospel today, the Apostle Thomas may have been filled with doubts, but he then completely surrenders Himself - to the mercy of Jesus - with an extraordinary profession of faith. Let us never despair at our sin or be discouraged by suffering, but instead, totally abandon ourselves to the mercy of Jesus Christ.

  1. In what ways do we struggle to ask for the mercy of God for ourselves? Do we pray for mercy for others and our world?

  2. In what ways do we show others mercy? Is there someone in our life we need to forgive? How could we more regularly practice works of mercy?

  3. Do we trust in the mercy of God? What is our usual response to challenging or painful situations that we face? Can we make an act of trust, praying, “Jesus, I trust in You”?

GUÍA DOMINICAL

   Quinto Domingo del Tiempo Ordinario

Primera Lectura - Is 58, 7-10 | Salmo Responsorial - Salmo 111, 4-5. 6-7. 8a y 9  | Segunda Lectura - 1 Co 2, 1-5 | Evangelio - Mt 5, 13-16

Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, por su gran misericordia, porque al resucitar a Jesucristo de entre los muertos, nos concedió renacer a la esperanza de una vida nueva. 1 Ped 1, 3


Durante los últimos 23 años - desde el cambio de siglo - el domingo siguiente a la Pascua se celebra como el "Domingo de la Divina Misericordia" por la Iglesia. Es apropiado continuar la celebración de la Pascua y regocijarse en el gran amor y misericordia que el Señor nos ha revelado a través de Su muerte y Resurrección. Jesús habló a una monja polaca llamada Santa Faustina de la profundidad de Su misericordia que tiene para Su pueblo:

“Soy el Amor y la Misericordia mismos (Diario, 1074). Mi Corazon esta colmado de gran misericordia para las almas y especialmente para los pobres pecadores… para ellas de Mi Corazon ha brotado Sangre y Agua como de una fuente desbordante de misericordia (Diario, 367). Que ningún alma tema acercarse a Mí, aunque sus pecados sean como escarlata (Diario, 699). Mi Misericordia es mas grande que tus miserias y de aquellas del mundo entero (Diario, 1485). por ti he permitido que fuera abierto con una lanza mi Sagrado Corazón y he abierto para ti una fuente de Misericordia. Ven y toma de las Gracias de esta fuente con el recipiente de la confianza (Diario, 1485).”

Para recibir la misericordia de Jesús y mostrarla a los demás, seguimos las tres "S" de la Misericordia:

  • Solicite misericordia - Dios quiere que nos acerquemos a Él orando sin cesar, arrepintiéndonos de nuestros pecados y pidiendo que Él derrame Su misericordia sobre nosotros y el mundo entero..

  • Sea misericordioso - Dios quiere que recibamos Su misericordia y que la dejemos fluir a través de nosotros hacia los demás. Quiere que demos amor y perdón a otros, como Él nos lo da a nosotros..

  • Sin cesar confíe completamente en Él - Dios quiere que sepamos que las gracias de Su misericordia dependen de nuestra confianza. Cuanto más confiemos en Jesús, tanto más recibiremos..

En el Evangelio de hoy, el apóstol Tomás quizás tenía dudas, pero luego se entrega completamente a la misericordia de Jesús con una extraordinaria profesión de fe. No nos desesperemos nunca por nuestro pecado ni nos desanimemos por el sufrimiento, sino que, por el contrario, abandonémonos totalmente a la misericordia de Jesucristo.

  1. ¿De qué manera nos cuesta pedir la misericordia de Dios para nosotros mismos? ¿Pedimos misericordia para los demás y para el mundo?

  2. ¿De qué manera mostramos misericordia a los demás? ¿Hay alguien en nuestra vida a quien debamos perdonar? ¿Cómo podríamos practicar más regularmente las obras de misericordia?

  3. ¿Confiamos en la misericordia de Dios? ¿Cuál es nuestra respuesta habitual ante las situaciones difíciles o dolorosas que afrontamos? ¿Podemos hacer un gesto de confianza, rezando: "Jesús, en Ti confío"?

* Gracias a ladivinamisericordia.org por las tres "S" de la Misericordia. Visite su sitio web para saber más sobre el mensaje de la Divina Misericordia.

St. Ann Parish